En medio de la mayor crisis sanitaria, económica y del transporte aéreo de los últimos 100 años, SKY se prepara a retomar sus operaciones. Con un enfoque únicamente en el mercado doméstico chileno, espera una reanudación muy gradual de los vuelos reconociendo un escenario altamente incierto a corto plazo.
“Nosotros queríamos tomarnos el tiempo para pensar cuál eran los mejores protocolos que podríamos implementar para resguardar la salud de los pasajeros y de nuestros trabajadores”, dice José Ignacio Dougnac, CEO de SKY. En su opinión, la decisión de paralizar los vuelos responde principalmente a que en marzo, cuando comienza la crisis en Chile, no existía mucha claridad cuales iban a ser los protocolos que iban a impulsar las autoridades ni cuales eran las mejores prácticas que la propia industria aérea iba a tomar.
“La decisión de iniciar el 1º de junio se toma en base a la información que llega de las autoridades”, explica. Sin embargo, reconoce que el aumento de contagios en los últimos días podría incidir en la revisión de algunas decisiones en las próximas semanas. “Es evidente que en las últimas semanas ha habido un retroceso (en términos de contagios), pero los protocolos que hemos puesto en aeropuertos, como a bordo del avión, son suficientes para garantizar la seguridad de los pasajeros”.
En los terminales aéreos, se tienen consideradas medidas de distanciamiento social en embarque y desembarque con el fin de reducir el contacto directo con el personal de la línea aérea. Una acción adiciona adoptada voluntariamente por la empresa es la desinfección de maletas cuando estas sean colocadas en las cintas de equipaje. Aprovechando la baja demanda, a bordo se bloqueará temporalmente el asiento central asegurando un distanciamiento social, pese a que los Airbus A320neo que equipan la flota cuentan con filtros HEPA que reducen el 99,9% de los gérmenes.
En conversación, Dougnac destaca que el protocolo es colaborativo con las medidas adoptadas por las autoridades sanitarias. Un enfoque que debiera continuar en el futuro hasta que no se cuente con alguna medida de tratamiento o la vacuna contra el COVID-19.
Los primeros vuelos que se reanudarán serán los que unen Santiago con Antofagasta, Calama e Iquique, por el norte, y Concepción, Balmaceda y Puerto Montt, por el sur. La proyección para el segundo semestre es una muy lenta recuperación que, por ahora, considera sólo vuelos en Chile. “Los vuelos internacionales están suspendidos por una serie de restricciones colocadas por los Gobiernos. En Perú, todavía existe una cuarentena total y cuando se levante, probablemente veamos una recuperación similar a Chile”, dice el CEO de SKY.
Ante la baja demanda que verá recuperación hasta 2021, la falta de liquidez preocupa a la industria, SKY incluída. Por la contribución permanente que realizan las compañías aéreas, los Gobiernos tienen que comprometer ayudas las que pueden ser de distinto tipo y a un muy bajo costo en comparación a otras fórmulas como, por ejemplo, un rescate.
“Muchos países en el mundo ya han salido en ayudas de sus aerolíneas por el impacto que tienen en la sociedad. En Chile aportan alrededor de 300.000 empleos de manera directa o indirecta diversos sectores como la hotelería o la gastronomía”, señala Dougnac. Además, expresa el rol importante que tienen las aerolíneas en un país con una geografía extensa y diversa como Chile, donde hay lugares donde el avión es indispensable dado que no existen alternativas de transporte.
La primera línea aérea de bajo costo y tarifas bajas (LCC, por sus siglas en inglés) de Chile hace un alto y marca pauta al momento de hablar de rescates. Si bien sostiene que el criterio de igualdad para todos los operadores debe primar, los Gobiernos deben incorporar otros para garantizar retornos al Estado.
“Las ayudas deben considerar criterios de sostenibilidad y contribución social”, puntualiza su máximo directivo. Estos deben estar definidos en función de cómo se devuelve la ayuda, ya que esta no debe estar orientada a cubrir deudas anteriores o que no son sustentables en el tiempo. “No sería lógico que el dinero sirva para pagar dividendos a accionistas, cubrir deudas o para financiar operaciones en otros países”, dice.
A juicio de Dougnac, las garantías de créditos a través del Estado es una de las medidas más adecuadas y rápidas para atender las necesidades del sector, ya que mientras más tiempo demoran en llegar las ayudas, mayores serán los costos en términos de empleos y para la economía del país. “Cada día que perdemos, Chile se pone más pobre y tiene menos conectividad, especialmente en regiones. Sería triste lamentar retrocesos respecto a lo mucho que hemos avanzado”.
SKY dice que está bien preparada para comenzar de nuevo y salir triunfante en el futuro. En función de ello, destacan que toda la operación se realizará exclusivamente con los A320neo. No obstante, ante la baja demanda considera una reducción de capacidad trabajo en el cual han ganado tiempo con la desprogramación de los A319 en abril. Considerando las entregas previstas para los próximos meses, actualmente están en conversaciones con los fabricantes y empresas de leasing para revisar la llegada de nuevos aviones en función de la demanda y también de la reducción de los ritmos de producción informados por Airbus.
Fotografía portada - SKY