En lo que puede ser considerado un hito para la industria aérea, Airbus consigue con éxito el primer reabastecimiento automático de combustible en vuelo. En una operación desarrollada en conjunto con la Fuerza Aérea de Portugal y la utilización de un A330 MRTT, el fabricante europeo alcanza este logro clave para inyectar mayor eficiencia a las necesidades estratégicas de defensa y ataque de los países.
Denominado como A3R (bautizado así por la referencia en inglés, automatic air-to-air refuelling), el programa consiste en lograr el reabastecimiento en vuelo completamente automatizado sin que el receptor posea un equipo adicional. Por consiguiente, se logra eficiencias al reducir la carga de trabajo del operador de reabastecimiento y en la posible adaptación de equipos adicionales para las aeronaves. Si bien esto dependerá finalmente de las características de cada aeronave, la posibilidad de que una operación de estas características pueda efectuarse es clave hacia el futuro ante eventuales misiones. En este caso, Airbus emplea un A330 MRTT y la Fuerza Aérea de Portugal un F-16 en 45 horas de vuelo y 120 contactos “en seco” con el sistema A3R.
Airbus declara que ninguna de las aeronaves tuvo problemas para desempeñarse en la misión, ya que cumplen con las capacidades y madurez para desarrollar esta operación. El objetivo del programa A3R es alcanzar tecnologías totalmente autónomas. Con este suceso, el fabricante europeo consigue además un punto comercial a favor al posicionar al A330MRTT como alternativa viable para muchos países que necesitan de equipos multipropósito.
“El logro de este hito clave para el programa A3R destaca el excelente desarrollo de la hoja de ruta de capacidad del A330 MRTT y confirma, una vez más, que nuestro avión cisterna es la referencia mundial para las operaciones de reabastecimiento de combustible presentes y futuras”, comenta Didier Plantecoste, jefe de Programas de Tanques y derivados de Airbus.
Además de proporcionar mayor eficiencia, el programa A3R brinda reducción de la carga laboral del operador que se limita sólo a la supervisión del proceso, más seguridad y precisión en la conexión y la transferencia de combustible, reducción de los tiempos y desconexión automática y efectiva de las aeronaves. En su conjunto, se consigue maximizar la superioridad aérea.
De no existir inconvenientes, la certificación del programa podría darse en el transcurso de 2021.