Vuelos privados violan aduanas sanitarias y ponen a prueba acción fiscalizadora de DGAC

La controversia por vuelos particulares en aviones y helicópteros desde Santiago hacia distintas zonas vacacionales en medio de la emergencia sanitaria y cuarentenas decretadas en Chile, han puesto en controversia el rol fiscalizador de las autoridades del Estado. En este caso particular, el de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), organismo responsable de normar y fiscalizar la actividad aérea en el país.

Como en otros países, Chile posee bajo un estado de catástrofe medidas excepcionales que restringen la libertad de movimiento mediante cuarentenas específicas, aduanas sanitarias, toques de queda, entre otras medidas. Sin embargo, estas no han sido suficientes para mantener a parte de la población en sus respectivos hogares, en medio de evidentes falta de empatía colectiva de la sociedad chilena. El feriado de Semana Santa es un ejemplo de ello con más de 23 mil desplazamientos desde Santiago hacia regiones, pese a la prohibición de la autoridad central para trasladarse a segundas viviendas.

Distintas autoridades y medios de prensa denuncian la vulneración de las barreras sanitarias mediante distintos medios. El Intendente de la Región Metropolitana, Felipe Guevara, es el primero en denunciar al señalar que tres personas (o grupos de personas) se habían trasladado a segundas viviendas por la vía aérea mediante el uso de helicópteros y aviones particulares con el objetivo de burlar los controles y llegar a residencias vacacionales. Horas más tarde, el Intendente de la Región de Valparaíso, Jorge Martínez, confirma lo indicado por su par y ante la falta de respuesta de parte de la autoridad aérea decreta un cierre del espacio aéreo para aeronave particulares en su jurisdicción. Lo mismo hace el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, quien en el programa Bienvenidos de Canal 13 (10/04/2020) cuestiona a DGAC por los vuelos privados efectuados.

DGAC es la autoridad aérea en Chile. Bajo su responsabilidad es autorizar y vigilar todos los vuelos que se realizan en el país, actividad posible mediante una cobertura total del espacio aéreo. Todo vuelo debe ser planificado y anunciado a las dependencias de control, indicando lugar de origen, destino, tipo de aeronave y cantidad de ocupantes. Por consiguiente, toda la información la recibe y aprueba DGAC.

Las autoridades exigen a DGAC brindar todo el apoyo y la información necesaria para esclarecer los hechos para aplicar sanciones correspondientes. Mientras la comunidad cuestiona el actuar de la institución por las autorizaciones entregadas a vuelos particulares, pese a que desde hace días rigen restricciones de movilidad impuestas por el Ministerio de Salud.

Ante la situación descubierta, DGAC responde el 09 de abril con la publicación de una Notificación Aeronáutica (NOTAM) que prohíbe la operación de aeronaves de aviación general, particular y aviación comercial de aeronaves pequeñas, en todos los aeródromos y helipuertos del país. El NOTAM rige desde las 18:00 horas del 09 de abril hasta las 08:00 del 13 de abril, a no mediar otras circunstancias que pudieran extender esta prohibición.

La restricción no afecta a aeronaves del Estado, ambulancias aéreas, evacuaciones aeromédicas, vuelos con fines sanitarios y de extinción de incendios. Posteriormente, la autoridad amplía la excepción a aeronaves pequeñas de aviación comercial que cuenten con salvoconducto otorgado por la autoridad pertinente para la tripulación y pasajeros, información que deberá consignarse en el plan de vuelo.

En el programa Bienvenidos de Canal 13, el secretario de DGAC Ricardo Gutiérrez señala que sólo en cerca de 40 aeropuertos y aeródromos existe personal de la institución para controlar la salida y llegada de vuelos. En sus comentarios, asegura que los ocho vuelos denunciados por violar las restricciones sanitarias “no salieron de un recinto aéreo controlado”, aunque precisa que ha entregado toda la información a las autoridades que lo requieran según lo establece la ley. Según radio ADN (10/04/2020), habrían salido desde la comuna de Vitacura -bajo cuarentena- hacia Zapallar y Cachagua.

La red aeroportuaria de Chile está conformada por 344 aeródromos, 102 helipuertos y siete aeropuertos (aquellos terminales aéreos con servicios de migración, Aduana y Servicio Agrícola y Ganadero para atender vuelos internacionales), todos distribuidos desde Arica a la Antártida, incluyendo los territorios insulares. DGAC administra directamente 101 de ellos bajo propiedad fiscal y en 36 hay personal de la institución, quienes brindan servicios aeroportuarios y de navegación aérea, además de ejercer labores de fiscalización y control, las que realiza también en la totalidad de la Red Aeroportuaria Nacional.

En televisión, DGAC no entrega mayor detalle de lo sucedido, así como de las sanciones que podrían tomar las autoridades civiles ante las vulneraciones de los controles sanitarios por vía aérea, aunque de castigos según lo establece el Código Aeronáutico. Pese a ello, la acciones denuncias permiten poner una alerta ante nuevas violaciones que pudieran efectuarse en el país.

La autorización de vuelos particulares durante el estado de catástrofe y la emergencia sanitaria se suman a la efectividad de las medidas fiscalizadoras reales que tiene DGAC en la actualidad. En marzo, dos ataques delictuales en el aeropuerto Arturo Merino Benítez de Santiago, de los cuales uno implica la sustracción de US$14 millones y €1millón desde las bodegas del terminal de carga, más el robo de un camión de valores desde la plataforma del aeropuerto  y el cruce de este por una pista activa que pone en riesgo la operación aérea en 2014, elevan la preocupación sobre la real capacidad fiscalizadora de la institución.

Fotografía de portada – Simón Blaise

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