Con una caída drástica de la demanda y el cierre de fronteras en distintos países del mundo, Emirates no es ajena a la crisis que afecta a toda la industria. Por primera vez, acontecimientos externos la obligan a retroceder temporalmente en sus operaciones como planes de expansión, lo que implica el cierre de operaciones y el estacionamiento de varios aviones. El impacto en la principal línea aérea de Dubái demuestra que la crisis está afectando a todas las líneas aéreas y advierte un escenario muy adverso en el corto plazo.
Ante la emergencia, Emirates suspenderá temporalmente todos sus servicios hacia América Latina, a excepción de Sao Paulo (GRU). Con el corte de Río de Janeiro (GIG), se cancelan las rutas hacia Buenos Aires (EZE) y Santiago, al menos hasta el 20 de mayo. Río de Janeiro fue una de las últimas ciudades en ser incluidas en la reducción de capacidad temporal global, que considera la paralización de vuelos hacia 55 destinos en todo el mundo.
La suspensión anunciada representa una afección a un tercio de la red de Emirates. En paralelo, la compañía también considera otras acciones como consolidación de servicios, como ocurre en Pakistán, por ejemplo, donde reubicará a los pasajeros de tramos a destinos Peshawar o Sialkot en la ruta a Islamabad, la capital, desde donde deberán viajar hacia sus respectivos destinos. Ante la decisión del Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, de imponer restricciones a viajes desde países de Europa, se cancelaron también las rutas desde Dubái a New York con escalas en Milán (MXP) y Atenas. La cuarentena impuesta por el emirato de Kuwait también obliga a efectuar suspensiones, al igual que a toda Italia.
Como consecuencia, Emirates se verá forzada a paralizar la mayoría de sus 115 Airbus A380. En las últimas semanas, la compañía venía estudiando la posibilidad de atrasar las entregas de los últimos aviones que tiene comprometidos con Airbus, aunque bajo el escenario que avecina, es probable que cancele la orden. Como en otras líneas aéreas, la crisis del COVID-19 imponga un término anticipado al superjumbo europeo.
Las suspensiones de Emirates son general hasta mediados de mayo. Sin embargo, el retorno de los vuelos puede variar dependiendo del término de las restricciones de viajes que imponen los Gobiernos. Por ejemplo, hacia Egipto (El Cairo), la paralización es sólo hasta el 31 de marzo.
En África, las ciudades afectadas son Abidjan, Accra, Argel, Casablanca, Conarky, Dakar, El Cairo, Harare, Khartoum, Lusaka, Luanda, Túnez, además de las islas Mauricio en el océano Índico. En el continente asiático, hay afecciones en las rutas hacia Bangkok, Hanoi, Ciudad de Ho Chi Ming, Guangzhou, Hong Kong, Shanghái (PVG), Peshawar, Sialkot y Taipéi. Dentro de la región del Medio Oriente e Irán, se cortan las rutas hacia Amman, Baghdad, Basra, Beirut, Damman, Jeddah, Kuwait, Medina, Riyadh y Teherán. Debido a escenarios específicos, los vuelos hacia y desde el Reino de Arabia Saudita, a excepción de Riyadh, así como desde y hacia Teherán están suspendidos hasta nuevo aviso.
En Europa, Emirates paraliza sus servicios hacia Barcelona, Bologna, Budapest, Ginebra, Estambul (IST y SAW), Larnaca, Lisboa, Madrid, Malta, Milán (MXP), Porto, Roma, Venecia y Varsovia. En Australia, sólo se cancela la ruta hacia Adelaida. En los Estados Unidos, el único servicio afectado por el momento es Fort Lauderdale, suspendido desde el 19 de marzo.
Como se menciona, exceptuando Sao Paulo (GRU), la crisis tendrá un impacto importante en la red latinoamericana de Emirates. Debido a la suspensión de los servicios a Barcelona, la continuación del tramo hacia Ciudad de México es la primera de la región en ser afectada desde el 20 de marzo. Las rutas hacia Río de Janeiro (GIG) y la continuación de los tramos hacia Buenos Aires (EZE) y Santiago serán detenidas temporalmente el 25 de marzo. Se espera que los vuelos se recuperen el 20 de mayo en las tres ciudades.
La decisión de Emirates representa un impacto importante para Santiago, capital que por primera vez consigue un enlace directo con el Medio Oriente y Asia. La ruta estaba siendo aprovechada por exportadores chilenos para el comercio con el Lejano Oriente, dado que China es el principal socio comercial de Chile, además para explorar nuevos mercados en el Oriente Medio y Rusia. Por el impulso de la carga aérea y otros ajustes operacionales, la línea aérea de Dubái realiza en diciembre 2019 un incremento de capacidad al pasar del Boeing 777-200LR al B777-300ER.
Según datos de la Junta Aeronáutica Civil (JAC), Emirates transporta en 2019 a 77.128 pasajeros en las dos rutas realizadas: Dubái – Sao Paulo (GRU) – Santiago (hasta junio), y Dubái – Río de Janeiro – Santiago, desde ese mes en adelante. El movimiento mensual es de más de 5.000 pasajeros aproximadamente, cifra que se viene manteniendo constante en los tres vuelos semanales que realiza. En el negocio de carga, el año pasado moviliza 5.051.836 toneladas en vuelos de pasajeros (bellies) como cargueros (en equipos B777F).
Como todas las líneas aéreas, Emirates está tomando medidas adicionales para cubrir los brotes de COVID-19 en todo el mundo. Dentro de los procedimientos que se realizan para eliminar el virus, la aerolínea utiliza una sustancia química ecológica aprobada para matar gérmenes y bacterias dejando una capa protectora duradera en todas las superficies. El proceso incluye una limpieza que comprende todos los aspectos del avión en cuanto a superficies, así como baños, galleys y áreas de descanso de la tripulación, además de los procedimientos normales como cambiar las fundas, pasar la aspiradora o reemplazar los materiales de lectura.
Si se alerta a la aerolínea sobre cualquier caso sospechoso o confirmado de enfermedades infecciosas, se desplegarán equipos de inmediato para una limpieza más profunda, para desinfectar a fondo todas las cabinas de ese avión con productos químicos más fuertes y aprobados. En todos sus aviones, Emirates utiliza filtros HEPA, que han demostrado eliminar más del 99% de los virus en el entorno de la cabina. Si hay un caso sospechoso a bordo, la compañía indica que renovará todos los filtros del avión de manera inmediata.
“La seguridad y el bienestar de los clientes y empleados es prioridad para Emirates”, declaran. Desde enero, aseguran que mantienen activado su equipo de respuesta de contingencia para monitorear los desarrollos diarios de COVID-19, manteniendo contacto con todas las autoridades sanitarias y reguladoras relevantes y garantizar que la respuesta de la aerolínea sea actual y apropiada.
En atención a los pasajeros afectados, Emirates ofrece flexibilidad en sus viajes, opciones y valores para toda su red con la posibilidad de cambiar fechas sin cargos o diferencias tarifarias. La línea aérea indica que los clientes visiten la página web para informarse de las condiciones y alternativas para los distintos casos. Reconociendo las afecciones a los viajes que se producirán, se ofrece a los miembros del programa Skywards de categorías Gold y Silver la capacidad de mantener su estado actual al cumplir el 80% de sus requisitos de viaje de nivel entre el 31 de marzo y el 30 de junio de 2020 Además, sus participantes con reservas para viajar entre el 1 de marzo y el 30 de junio de 2020 podrán beneficiarse de un adicional de 20% de millas de su nivel.