Con la premisa de que los vuelos de ultra larga distancia serán parte fundamental de los viajes aéreos en el futuro, especialmente en zonas geográficas extremas como lo es el Pacífico Sur, Air New Zealand “innova” en la industria al presentar su más reciente producto: Skynest. Siguiendo los resultados positivos de otros productos como el Skycouch, que consiste en ocupar toda una fila de Economy para proveer una plaza más confortable, la línea aérea neozelandesa patenta las literas a bordo.
Colocar literas para pasajeros al interior de un avión no es nuevo. Básicamente, la idea se viene materializando desde la década de 1950, pero que vuelven a cobrar fuerza con nuevos diseños de interiores, especialmente para acomodar zonas de descanso para las tripulaciones. Economy Skynest, como se denomina oficialmente a este producto, sigue esa idea. Después de tres años de investigación, Air New Zealand considera que es viable para “devolver la magia de volar”.
“Tenemos una enorme cantidad de trabajo de investigación en marcha para buscar innovaciones de productos que podamos ofrecer en todas las cabinas del avión. Un punto adverso para los viajeros económicos en vuelos de larga distancia es la incapacidad de estirarse. El desarrollo de Economy Skynest es una respuesta directa a ese desafío”, dice Mike Tod, jefe de Marketing y Atención al Cliente de Air New Zealand.
Economy Skynest consiste en seis literas para pasajeros de dos metros de largo que permitirán a los pasajeros descansar en una verdadera cama. Aunque el producto está patentado, todavía se estudia la ubicación de este en el avión, así como su comercialización y uso a bordo. Si bien todavía tienen que definirse detalles Tod adelanta que el pasajero de Economy podrá reservar su asiento, además de la opción de Skynest.
La idea de Air New Zealand se espera que tenga una gran aceptación no sólo entre los pasajeros, sino entre otras aerolíneas a las que no duda poner a disposición la licencia de Economy Skynest. La confianza en la aceptación al interior de la industria deriva de que se trata de una alternativa viable para ofrecer más comodidad y espacio para la sección de Economy Class sin alterar o comprometer significativamente el diseño general de la cabina. Dependiendo de su ubicación, Skynest puede ser ubicado en zonas del avión donde no es posible colocar asiento, algo similar como ocurre con los crew rest.
Para materializar la idea, Air New Zealand trabajará ahora con las autoridades aeronáuticas para la certificación de Economy Skynest. Confiada en que no existirán reparos, se espera que esta pueda darse en el transcurso del presente año lo que permitirá una rápida introducción en la flota de larga distancia. La intención es lanzar el producto en 2021 en la ruta sin escalas Auckland – Nueva York cuya duración será de 17 horas y 40 horas minutos en esa dirección y algo más de 18 horas en el tramo de retorno.
Por su ubicación geográfica, Air New Zealand realiza numerosos vuelos de larga distancia. Al igual que su vecina Qantas, los de ultra larga distancia son una opción viable para mejorar la conectividad del país con nuevos pares de ciudades ya sea en la cuenca del Pacífico como más allá. Para estos vuelos, la compañía posee una flota conformada por ocho Boeing 777-200ER, siete B777-300ER y 14 B787-9.